miércoles, 4 de julio de 2012

John Verdon



Mi cumpleaños es en verano, y hace un par de años aproveché para hacerme con "Sé lo que estás pensando", que además me serviría de entretenimiento durante los días de sol y playa. ¡Qué gran equivocación! Lo único que conseguí con él fue pasar un día completo debajo de la sombrilla, y tener que comprarme unas cuantas revistas para el resto del verano, porque es tal el modo en que el protagonista te mete en la historia que no fui capaz de soltarlo hasta que lo terminé. 
El detective David Gurney acaba de jubilarse. Una pena, puesto que es uno de los mejores investigadores de asesinatos en serie. Es por ello que acude a él un antiguo amigo de juventud, que está recibiendo misteriosos anónimos que le amenazan con revelar sus secretos. "Piensa en cualquier número del uno del mil. Ahora verás lo bien que conozco tus secretos. Abre el sobrecito". Ahí comienza la nueva aventura de Gurney, que no puede dejar de interesarse por el caso y comienza poco a poco a investigar y a meterse en la mente del delincuente. 

Afortunadamente, este es solo el primero de, al menos, una trilogía de casos para el detective Gurney. El verano siguiente pude disfrutar de "No abras los ojos". En esta ocasión, una preocupada madre reclama la ayuda del detective para descubrir al culpable del asesinato de su hija, decapitada en el día de su boda. Nuevamente, el ritmo de la novela, la inteligencia de los asesinos, que te hace estar continuamente alerta y pensando en su próximo paso, la convierten en una novela apasionante. 

De momento no puedo contaros más, pero si os adelanto que una de mis próximas lecturas será, sin duda, "Deja en paz al diablo", última entrega de la saga, editada en España desde hace un mes.