Bueno, por fin puedo dedicar mi reseña a la trilogía más controvertida de los últimos meses: Las Sombras.
Antes de ofreceros mi opinión, mi valoración personal o un resumen del argumento, tengo que advertir y confesar un detalle: esta trilogía me ha atrapado, enganchado y la he devorado sin querer.
Como la mayoría sabréis, relata la historia de amor entre Christian, un rico empresario, megalómano y practicante de BDSM, y Ana, una inexperta y joven estudiante de literatura. Para ahorrar más detalles, y que los que no la han disfrutado puedan hacerse una idea, podemos resumir el argumento como la historia de sexo que nunca tuvieron Bella Swan y Edward Cullen (Crepúsculo...).
Han sido unos de los ejemplares más alabados y criticados por el público en los últimos tiempos, no ha dejado a nadie indiferente y, está claro, ha disfrutado de una campaña de marketing que ya le gustaría a más de uno. Bajo mi humilde opinión, puedo simplemente decir que no es un libro (o 3) que vaya a revelarnos algo nuevo, que vaya a sorprendernos ni que, probablemente vaya a ser recordado dentro de unos años, pero para mí la literatura se divide en varias ramas. Existen, y nos gustan, las obras que pasan a la historia, como una buena película de Cary Grant, con mensaje, que emociona y no pasa de moda; y están las novelas cuyo fin es entretenernos, evadirnos de la realidad momentáneamente o hacernos llevar mejor las horas en transporte público, como una comedia de Meg Ryan... Y éstas últimas, pese a ser peor valoradas por la crítica, no tienen nada que envidiar a las primeras, pues cumplen su propósito a la perfección: hacernos pasar un buen rato. Como habréis imaginado, en este grupo es en el que yo incluyo a las sombras, y es por eso que no me parecen justas las malas críticas que sobre ellas he leído.
Dicho esto, no negaremos que necesita bastantes retoques en cuanto a variedad de vocabulario, ya que es un poco repetitivo con determinadas expresiones, aunque éste es un tema que habría que investigar si es achacable a la autora o al traductor...
Antes de darte cuenta estarás sumergido en la historia (que, por cierto, obviamente incluye sexo), volarán las páginas y reirás y te emocionarás con los personajes.
En resumidas cuentas, sopesando todos estos pros y contras, si estás pensando en leerlas, no lo dudes.
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